martes, 19 de julio de 2011

Capítulo 5: Preguntas sobrenaturales

Domingo 14 de Noviembre - 03:00 PM

Nos despertamos tarde los dos porque anoche, luego de mi pregunta sobre Dancing Mood y que ella me dijo "no los conozco". Nos Pusimos a escuchar durante toda la madrugada esa música hasta quedarnos dormidos. Tatiana se quedó fascinada, y más con la idea de que esta noche iban a estar tocando y que los ibamos a ir a ver. No desayunamos, comimos directamente. Tatiana se ofreció a cocinar.

- ¿Pero sabés cocinar? - Le pregunto.

- ¡Obvio!

- ¿Especialidad?

- Todas. Te voy a hacer una ensalada riquísima. Pero vos ayudame a prepararla.

- ¿Yo? ¿Qué me viste cara de ayudante de cocina? Nah, no sirvo para esto yo. Si querés puedo ir a comprar algo que falte, o pongo la mesa.

- Bueno, dale, pero movete nene.



A medida que van pasando los días, nos vamos llevando de una manera más informal y mejor. Ya van cinco días que Tatiana está en casa, y me fue de gran ayuda en todos los sentidos. Fui a la calle a buscar una verdulería para comprar tomates para la ensalada, mientras ella se quedó en casa cocinando.
Sinceramente, nunca fui a una verdulería, así que me detuve a preguntarle a una señora. Son como las Guia-T de las verdulerías y de los mercados.

- Disculpe señora, ¿una verdulería? - Le pregunto amablemente

- En la esquina - Me contesta mientras me indica hacia qué dirección debía caminar. ¿Por qué la mayoría de las verdulerías están en una esquina? Lo mismo con las heladerías. Una vez ahí, veo que está cerrada. Un domingo a esta hora se complica. Golpeo la chapa.

- ¿Hola? - Pregunto.

- ¿Sí? ¿Qué necesita?

- ¿Qué tal? Necesito tomates.

- Está cerrado.

- ¿Y para qué me preguntás qué necesito? ¿Qué? ¿Sí te decía lechuga no estaba cerrado? Dale, abrí.

- Está cerrado le dije.

- Pero la concha de su madre - sussurrando - Por favor, son 2 tomates de mierda. Haceme el favor.

- ¡ESTÁ CERRADO HE DICHO MIERDA!

- ¡Anda la puta que te parió pelotudo de mierda!

Sigo caminando, me perdí por todas las calles buscando una verdulería hasta hacer diez cuadras y encontrar una que estaba abierta pero no había nadie.

- ¿Buenas? - Pregunto.

- ¿Sí? - Gritan desde el fondo.

- Necesito tomates.

- ¿Qué?

- ¡TOMATES!

- Un momento por favor.

Pasan cinco minutos.

- ¿Hola? - Vuelvo a preguntar.

- ¿Sí? - Gritan desde el fondo nuevamente.

- ¿Me vas a atender?

- ¿Qué necesita?

- ¡Tomates! - Gritando.

- Bueno no me grite que no soy sordo. ¿Tomates? - Viene hacia el frente de la verdulería.

- Sí, tomates. Me decís que no sos sordo y me preguntás "¿tomates?"

- Bueno, eh. Tranquilo. Digame, ¿redondo o perita?

- ¿Qué?

- Ah, y el sordo soy yo. Si quiere tomate redondo, o perita.

- Ah, hay más de un tipo de tomate... ¿desde cuando?

- Desde siempre.

- O sea que, toda mi vida comí ambos tomates sin jamás distinguir uno de otro... qué mal.

- Bueno, ¿qué va a llevar?

- Pero digame las diferencias entre uno y otro así sé cual llevar.

- Pero, si usted me está diciendo que nunca distinguió uno del otro, ¿qué importancia tiene eso ahora si para usted es lo mismo?

- Mmm, es verdad. Bueno, perita.

- ¡¿Perita?!

- No, mejor redondo.

- Bueno. - Empieza a buscarlos. - ¿Cuántos?

- No sé, tres.

- Bueno.

- Decime la verdad. Vos tampoco sabés la diferencia entre los tomates, ¿no?

- Sí, pero es algo que pocos verduleros podemos saber. Como también sabemos por qué la mayoría de las verdulerías estan en una esquina.

Luego de la travesía de los tomates. Llego a casa y dejo la bolsa de los tomates donde estaba Tatiana por terminar de cocinar.



- ¿Por qué tardaste tanto? - Me pregunta Tatiana mientras saca los tomates.

- Me perdí, no encontraba verdulerías abiertas, un quilombo.

- Uh... che, ¿no había perita?

- ¿Qué onda? ¿Soy el único pelotudo que no sabe que existen dos tipos de tomate? El de la verdulería me preguntó y yo ni idea.

- Jajaja, ¿en serio no sabías? Qué boludo.

- ¿Vos sabés la diferencia?

- Que uno es redondo... y el otro, tiene forma de perita.

- Ah... qué mujer mágica.

- ¿Mágica? Jajaja ¿por qué?

- No sé. Busquemos en el diccionario concepto de mágia y te digo.

- Nah, dale, dejate de joder.

- No, busquemos. - Voy hacia el diccionario del estante y busco - Acá dice dos conceptos. Para mi te quedan bien ambos. Uno: Arte con que se pretende producir, valiéndose de ciertos actos o palabras, resultados contrarios a las leyes naturales. ¡Ja! Mirá justo que hablabamos de sobrenaturalidad ayer. Qué causalidad, ¿no? Dos: Encanto, hechizo o atractivo de alguien o algo.

- ¿Me estás queriendo decir entonces que tengo un encanto atractivo?

- Mmm - ¿Este seguramente es otro momento que voy a desaprovechar o es simplemente mi imaginación? - Sí, algo así. Tenes tu encanto.

- Mira vos, qué manera más distinta para que alguien me diga linda.

- Y bueno, esos son los precios que pagas al estar con una persona tan distinta. Cociná que tengo hambre y en un rato nos vamos. Mirá que es temprano el recital.


Después de comer, yo lavé los platos. Parecíamos pareja asignando y dividiendo las tareas de la casa. Cuando terminé fui a tirarme al sillón con Tatiana que estaba viendo una película. Yo cada tanto miraba el reloj que tenía sobre la televisión porque estaba muy ansioso por el recital de hoy.

- Che... te hago una pregunta - Le digo a Tati, que estaba mirando la película bastante concentrada.

- Decime.

- ¿Por qué cada vez que uno mira las agujas del reloj, parecería que un segundo dura más?

- Porque sos conciente del paso del tiempo.

- Lo mismo me pasa cuando pongo algo en el microondas. Pones algo un minuto, vas al baño, vas al comedor, volvés, y sólo pasaron veinte segundos.

- Claro - Me ignora, sigue viendo la película.

- O ¿por qué en inglés al reloj se le dice "watch" y mirar también se dice "watch"? ¿Entonces "mirar el reloj" en inglés se diría "Watch the watch"? ¿Y cómo saben que no se confunden y no están diciendo reloj en vez de mirar? Qué loco.

- Bueno, me parece que alguien está un poquitito obsesionado con el tiempo.

- Ok, perdón. No molesto. Seguimos con la peli.

Una vez llegada la hora, ahora sí: noche de Dancing Mood.
Mientras ibamos le mandé un mensaje a Guille, me dijo que estaba por llegar, como yo también estaba cerca, nos ibamos a encontrar a una cuadra para ir juntos. Teníamos que ir temprano para comprar las entradas. Me resultaba un poco incómoda la situación de que Ana esté donde Tatiana también, pero trataba de no darle importancia.
Una vez en la esquina y que les presenté a Tatiana, comenzamos a ir hacia las filas.

- ¿Sabés cuál es la fila para comprar? - Le pregunto a Guille.

- No, a ver, bancame un toque que pregunto al último de acá. - Guille va hacia un tipo que estaba solo último en una de las dos filas - Disculpa, loco ¿tenés entrada?

- No. - Le contesta el tipo y se da vuelta nuevamente, se acerca otro hombre y se queda junto a él.

- Gracias. Acá chicos. - Vamos hacia donde estaba Guille - ¿Y ustedes de dónde se conocen?

- Qué buena pregunta - Dice Tati - Ni idea. Fue algo raro...

- ¿Pero están saliendo? - Guille siempre tan directo. Mientras, yo callado atrás de ellos dos hablando con Ana en una situación muy incómoda.

- No, pero estámos viviendo juntos - Interrumpo con este comentario.

- Ah, sos rápido guacho eh

- Pero no estámos saliendo, ella está en la ciudad por poco tiempo, y se está quedando acá.

Pasan varios minutos.

- Che, Guille - Le digo mientras voy más al lado de Tatiana - ¿Estás seguro de que ésta es la fila para comprar las entradas?

- Obvio papá, me lo dijo el de acá adelante.

- Entonces ¿por qué no avanzamos? Digo, hace diez minutos que estamos parados en el mismo lugar.

Guille se quedó pensando un momento y procesando la idea de que tal vez sea un idiota. En el buen sentido, sin ofender.

- Pero el tipo de acá me dijo que era ésta fila. A ver... - Le toca el hombro al hombre de adelante - Perdón, ¿no? Pero ¿no me dijo que ésta era la fila para comprar las entradas?

- No.

- ¡Sí! Vos me dijiste.

- No. Vos me preguntaste si tenía entrada y no tenía.

- ¿Y entonces?

- La estaba comprando mi amigo en la otra fila.

- Ah, bue... qué vivo que sos.

Nos vamos hacia la otra fila. Luego de varios minutos, compramos las entradas, la otra fila ya estaba avanzando y entramos al lugar. Compramos un par de cervezas, y nos pusimos a hablar en la barra esperando a que sea la hora del show. Después de una hora sale Dancing Mood al escenario. Guille se emocionó y se fue para adelante. Entre aplausos y gritos, el líder dice unas palabras:

- Buenas noches muchachos, gracias por haber venido una vez más, haciendonos el aguante, como siempre. Espero que la pasemos bien, Dancing Mood Deluxe para todos ustedes




El show comenzó y los poderosos instrumentos de la banda empezaron a mover a la gente de lado a lado. Lo interesante de Dancing Mood, es que se destacan por su fusión de géneros y los tantos integrantes de las bandas realizando sus solos improvisados al mejor estilo jazz. Sin embargo, lo que más me gusta de esta banda, es que la mayoría de sus canciones son instrumentales.
Miraba fijo a Tatiana y estaba con los ojos brillosos, disfrutando de cada una de las canciones. Por lo general cuando uno escucha música (sobre todo en un recital) se siente identificado con las letras, pero qué difícil es sentirse identificado con canciones que son completamente instrumentales. Supongo que debe ser un ejercicio de sinapsis muy interesante. A vos te dan el nombre de una canción, por ejemplo, en el momento que sonó "You're so delightfull", pensé desde el momento que conocí a Tatiana hasta ahora, no sé por qué elegí esos pensamientos. Tal vez esa fusión de cada instrumento que uno yo dentro de mi percepción sonora, me lleva a esos recuerdos, pensamientos y sentimientos. Sentimientos de que Tatiana realmente me estaba cambiando, no sé en qué, pero podía sentir cambios. Después de otras canciones, me di cuenta de que me pasaba cada vez más seguido.
Mientras tanto Guille estaba en el medio del pogo, haciendo quilombo y disfrutando. Ana estaba tomando una cerveza en la barra con cara de aburrida, mirandome con malos ojos.
Cuando Dancing Mood comenzó a tocar temas más tranquilos, Guille vino hacia atrás donde estabamos nosotros.

- Siempre quise tocar la trompeta - Comenta Guille mirando hacia el escenario - No lo puedo creer, es buenísimo.

- Estás todo transpirado - Le dice Tatiana - Tomá un poco de cerveza.

- ¡Gracias!

Mientras se escuchaba la trompeta de fondo y guille tomaba la lata imitando que fuese una trompeta, tuve la sensación de que eso nos pasa a muchas personas. Me refiero a soñar con hacer algo, mirando desde abajo del escenario, apreciando otro mundo, paralizado por el alcohol.

- Guille - Le digo - esa cerveza podría ser una trompeta - Parecería que lo estaba tratando de alcoholico.

- ¿Vos decís?

- Si es lo que te gusta...



Qué linda que es la música, si pones instrumentos sueltos con sus ritmos y velocidades pueden no significar nada, pero la combinación de ritmo y velocidad con otros instrumentos pueden generar algo hermoso. Lo mismo pasa con el amor y las personas, ¿verdad? Cada persona es un instrumento con un sonido particular, buscando combinar el ritmo y velocidad de otra persona, que es otro instrumento, para generar música. Generar música es generar sentimientos, momentos, emociones. Por eso considero que la música entre dos personas es tan importante. Y cada relación, es una canción nueva en nuestra vida. No llamaría relación a lo que está pasando con Tatiana, pero ella me estaba haciendo sentir como nuevo.
Cuando terminó el recital, salimos para comer algo rápido y después cada uno a su casa. En un momento mientras estabamos yendo a comer, lo aparto a Guille de las chicas para preguntarle sobre Ana.

- ¿Y? - Le pregunto.

- ¡Estuvo re bueno! - Me grita Guille entusiasmado por el recital. - Me cabe la originalidad para los nombres de los temas, siempre le ponen "ska" a todo. Skafrica, Latin Goes Ska, Ska In Viena Woods. Estaría bueno llamarse oscar para de nick en el msn tener "O-SKA-R", o como el tío de Simba en el rey león, en vez de Scar, Skar, o Al Pacino sería Skarface.

- No, tarado. Si averiguaste qué hace Ana mañana.

- Ah, si.

- ¿Qué onda?

- Bueno, me dijo que entre ella y Luz están viendo decidir por un trabajo nuevo que les ofrecieron.

- ¿Trabajo de qué?

- No me quiso decir, me dijo que era algo de viajar a otros lugares, y que si aceptaba, ya no la iba a ver, porque le ofrecen buena guita y va a estar viajando. Se muere de ganas de ir, está re enganchada, pero no sabe si se va ella o Luz.

- ¿Por qué no se van las dos?

- Me dijo que el tipo este, se puede llevar sólo a una persona de viaje con él. Porque supuestamente es algo peligroso y secreto, y no me quiso decir más. Raro, ¿no?

- Sí. Gracias, me sirvió mucho esto.

- De nada, loco.

Teniendo en cuenta esto, no creo que Tatiana no deba saber esto. No tengo ni idea de quién es Tadeo, pero ¿por qué será tan secreto y peligroso? Si una sola persona puede viajar, y a Ana le están ofreciendo la oportunidad, teniendo en cuenta que Tatiana no podía ubicarlo ¿significa que ella no va a viajar? ¿Entonces por qué le pasaron la dirección? No puedo arriesgarme y no decirle nada.
Antes de llegar a algún McDonald's para ir a comer, agarro a Tatiana del brazo y la aparto de los chicos.

- Vayan yendo ustedes - Le digo a Guille y a Ana.

- ¿Qué pasa? - Me pregunta Tati mientras intenta caminar hacia ellos.

- Vamos para casa.

- ¿Por qué? Tengo hambre.

- Es importante, tenemos que hablar. Pero vamos ahora para allá.

Fuimos lo más rápido para el departamento. Cerré la puerta con llaves por las dudas. No tengo ni idea de qué tan peligroso podría ser Tadeo.



- Te tengo que contar algo. - Le digo un poco nervioso.

- ¿Qué pasa? Me estás asustando.

- Necesito que me digas bien quién es Tadeo

- Es que...

- ¡No! - La interrumpo - Es en serio, es importante que me digas algo sobre él, o sobre esos viajes que vos decís. ¿Te pensas que no me doy cuenta de lo nerviosa que te pones cuando hablas de este tema o de este tipo? ¿Quién es y qué hace?

- Por favor Lauti, no me obligues a que te diga... es peligroso.

- Ahora también es peligroso.

- ¿Por qué?

- ¿Viste Ana?

- Sí.

- Bueno, el viernes fue un tipo al trabajo y le dejó una tarjeta. Esa tarjeta decía "Puente de la mujer - Puerto Madero Lunes 15 de noviembre 23:50 horas". Exactamente lo mismo que te llegó a vos en ese aparato raro que tenés.

- ¿En serio? - Me dice con una voz casi aterrada.

- Sí... y sé más, pero necesito que vos me digas, para que yo pueda entender qué está pasando.

- ¿Qué más sabes? Por favor, decime.

- Nada, Ana le dijo a Guille que Tadeo le ofrecía un trabajo para irse de viaje, por muy buena guita, pero que sólo ella puede viajar con él. ¿Vos no te vas a ir? Si sólo una persona se puede ir con él. ¿Por qué? ¿Qué hace ese tipo?

- Está bien, te voy a contar, pero me tenés que prometer que me vas a creer y que no vas a decir nada, mucho menos hacer.

- A ver...

- ¿Te acordás la noche que nos conocimos que hablabamos de que cualquier tipo de pregunta siempre tiene una manera compleja de contestarse?

- Sí.

- ¿Te acordás que me habías preguntado y nunca te dije?

- Sí, de donde sos. Todavía me lo pregunto.

- Bueno... la pregunta no sería de donde soy... sino, de cuando.

- ¿Eh? ¿De cuando sos?

- Exactamente.

- No entiendo.

- Em, vengo del futuro.

- ¿Qué? Dale, no es joda.

- Te estoy diciendo la verdad. Vengo del futuro, soy una viajera en el tiempo. Me dijiste que me ibas a creer.

- Pero no puedo creer esto. No tiene ningún tipo de sentido. Va más allá de toda naturalidad.

- Bueno, ¿ves? Ese tema también lo estuvimos hablando, lo de preguntas sobrenaturales, o hechos sobrenaturales. ¿No te cierran más las cosas? ¿Por qué hablamos durante todos estos días sobre temas que llevan a lo mismo? El paso del tiempo. ¿Por qué sentiste que el tiempo se detuvo en el subte o por qué lo tenés tan presente? Porque de alguna manera, yo te genero eso. No te digo que tengo poderes de viajar en el tiempo, pero al ser viajera, tengo un mínimo poder. De darte la sensación de que el tiempo puede quedarse congelado, o que recuerdes tu pasado, o que vivas acelerado, o ¿por qué hablamos de leyes espacio-temporales y causa-efecto? Sé que es difícil de entender, pero... que nos hayamos conocido, no fue casualidad, fue causalidad, yo ya sabía que iba a pasar.

- Para, no estoy entendiendo nada.

- No sé como explicarte más. A ver, dejame pensar... yo ya sabía que te iba a conocer. Tadeo es una persona que trabaja viajando en el tiempo para modificar el pasado, con leves causas, por su propio bien, por ejemplo: ganar plata. Sabe absolutamente toda información sobre los lugares que viaja, a sus viajeras, les da la información necesaria para poder hacer los trabajos que nos piden. Por eso no sabía que The Smiths existía o no. No tengo toda la información de tu tiempo, de tu 2010.

- ¿De qué año venis? No puedo creer que esté preguntando algo así.

- No es recomendable que sepas estas cosas.

- Decime.

- Bueno... del 2121.

- ¿Cómo te puedo creer todas estas cosas? Es imposible.

- Es que no sé cómo explicarte o hacer para que me creas. No me trates de loca. Por eso trataba de no salir mucho, porque no debería estar acá. Tuve una pelea con Tadeo y me dejó perdida en un tiempo que no conozco más que simples cosas. Y al parecer, buscó otra viajera, a Ana. A mi ahora me quiere, porque me va a sacar este aparato que está en mi valija que sirve para viajar.

- A ver, usalo, viaja.

- Sólo Tadeo lo puede activar. Además, también se necesita un reloj de 6 agujas. 2 para la hora, 2 para los minutos y 2 para los segundos. Una hora es la actual, la otra es la hora a la que decidis ir, con el otro aparato elegis el año.

- Pará... la noche que te conocí, en la lluvia, que me salvaste del auto... yo vi ese reloj, yo lo tuve en mis manos.

- Si, ya sé. ¿Ves? Ahora me crees.

- Masomenos, de a poco me cierra, aunque es irracional.

- ¿Y querés saber por qué se te desapareció de las manos? Porque sólo Tadeo lo puede tener. Cuando yo lo tuve, me di cuenta de que con los viajes del tiempo, y al no saber sobre los "efectos secundarios", me estaba olvidando de quién era yo. Por eso lo tiré. Se puede decir que ese reloj tiene algo mágico o incontrolable. Incontrolable como el paso del tiempo mismo...

- No entiendo, a ver. Explicame, ¿cómo es posible viajar en el tiempo en el 2121?

- No sé.

- ¿Cómo no sabes?

- A ver, ¿vos sabes cómo funciona un cohete que viaja al espacio?

- No...

- Por eso. Es lo mismo. Yo tampoco sé. El tema es que tengo mucho miedo.

- ¿Por qué?

- Por Tadeo, es peligroso. Sin este aparato, no se va a ir, no puede hacer nada. Y va a hacer todo para sacarmelo.

- Daselo y listo.

- Pero yo no me puedo quedar acá en este tiempo, no es mi época.

- ¿Por qué no te podés quedar?

- Dale, boludo... ¿no viste "Volver Al Futuro"? No puedo alterar absolutamente nada de lo que esté en este tiempo, para no alterar mi presente, o sea, tu futuro, o el futuro de cualquiera. Es peligroso.

- ¿Por eso sólo una persona puede viajar con Tadeo?

- Sí.

- ¿Y qué pasa cuando cambia de viajero como lo va a hacer mañana?

- Dos cosas. Si quedó todo bien, te regresa a tu tiempo, bajo la promesa de no poder comentar absolutamente nada sobre los viajes y si no hablaste de este tema con nadie.

- Pero con vos estaba todo mal.

- Por eso, no puede correr el riesgo de dejar viajeros perdidos en el tiempo. Ya pasó una vez...

- ¿Qué pasó?

- De que algún viajero en el tiempo se quede en otra época y eso obviamente trajo problemas. Ahora Tadeo me había dado esa tarea, encontrar al viajero perdido en el 2010.

- ¿Y antes de que nos conozcamos lo pudiste encontrar?

- La noche que te conocí fue la noche que llegamos...

- No entiendo, ¿por qué decidiste trabajar para un tipo tan peligroso?

- Porque el viajero en el tiempo perdido era mi novio. El tipo que estaba en el bar el viernes, era él.

- ¿Y ahora?

- Nada, le dije que Tadeo lo buscaba, así que se fue. Por eso llegué tan tarde.

- ¿Todo este esfuerzo por un ex novio? - Hasta en el momento de mayor incertidumbre demostré mi interés por Tatiana.

- Digo que era mi novio porque después de este problema, es imposible. Cometimos el error de enamorarnos y digamos que para los viajeros está prohibido enamorarse.

- Ah, qué triste... entonces... ya me dijiste si quedó todo bien cómo actúa Tadeo. Ahora explicame tu caso, ¿qué va a hacer?

- Me va a matar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario